Espermograma socialista

* Cortesía de Anónimo 1

Como soy un buen novato fui todo el camino erotizándome. Al llegar ya había explorado toda la matriz de soluciones para acomodarme la pinga en el pantalón y, carente de recursos, solo me quedaba la desfachatez de mirar arriba cuando la dama que me recibió miraba abajo.

-Escoge una y tienes una hora.

Sin dudar me lleve a Tania la miliciana, las otras opciones evocaban más un sesgo generacional que artes amatorias, así que descarté rápidamente a Mariana la cubana y a Rosita la vedette. Recuerdo que oí desfilar por el pasillo a Frodo con una horda de hobbits, a Mickey Mouse, y a Benedicto XVI, con el pensamiento de que en cualquier momento irrumpirían a través de la puerta junto a la Charanga de Bejucal. Cuando miraba a Tania descubría planes de emboscadas y al pueblo uniformado, pero nunca lascivia. Pude in extremis, porque evoqué las gotas de sudor mías en el vientre de mi esposa, y finalmente entregué la revista Mujeres con la foto de Tania en portada, y el vasito con una orden médica que decía: Espermograma.

27.7.13