Aburrida paginita

En Cuba los periódicos tienen 8 páginas como norma, y la gente tiene la cabrona costumbre de hojear los diarios y revistas de atrás hacia adelante, quizás porque es en el fondo donde suele aparecer la distracción que tanto buscan. Pero la página 8 del diario Granma es la más aburrida del mundo. ¿Y por qué me atrevo yo, ser ignorante que no ha leído los rotativos de Zimbawe, a afirmar tal cosa? Pues porque no me interesa tanto la prensa africana, me importa la de aquí, la que puede y debe asumir de una vez al menos una parte de sus funciones sociales, descritas grosso modo tempranamente (1948… o por ahí) por Harold D. Lasswell en su antológica «Estructura y función de la comunicación en la sociedad».
Lo último que he digerido en la mencionada página, dedicada casi siempre a tratar «temas de interés nacional» es esto: un reportaje sobre la puesta en marcha de «un grupo» (¡qué inigualable precisión….!) de trilladoras de granos en la nororiental provincia de Holguín; y otro sobre una innovación en una planta de asfalto en Pinar del Río (consistía el «novedoso invento» en bajar el nivel del suelo para que los camiones pudieran recibir la carga desde lo alto…. lo cual fue catalogado como «la más trascendente innovación del año» en el territorio pinareño)… y luego no quieren que la gente haga bromas sobre pinareños.
Mientras, la vida sigue igual: continúan ausentes nuestros asuntos de la esquina y del dominó del barrio: el salario del obrero, la incoherente política de finanzas y precios, la autopreservación del esquema burocrático, la corrupción, la calidad de los servicios de salud y educación, la disponibilidad de alimentos en las ciudades, el transporte público, la libertad de viajes al exterior, la tolerancia ideológica, mi humano y natural derecho a no estar de acuerdo y expresarlo donde y cómo me de mi reverendísima gana siempre que no limite con ello el idéntico derecho de los demás, la extensión social del uso del Internet y las nuevas tecnologías, la cooperativización de algunos servicios públicos (no el simple y desfasado concepto, desentendido de las necesidades sociales, del arrendamiento de locales a la naciente pequeña empresa prinvada)… en fin, ausente la buena crítica, el reportaje entretenido y útil, la investigación y el periodismo decente, comprometido y respetuoso del ciudadano.